En la parte central de la iglesia, cerca del altar, hay una urna, un par de cartas, una imagen, y una cédula que explica entre otras cosas que:
Aquí se tienen fragmentos de restos del cuerpo de San Justino Orona quien se ordenó sacerdote el 7 de agosto de 1904. Fue acribillado derramando su sangre en tstimonio de su fidelidad a Cristo el 1 de julio de 1928. Sus restos mortales descansan en la Parroquia de San Felipe, Cuquio. El santo escribió: "El camino que lleva a la patria hay que seguirlo con alegría, sirviendo a Dios en la tierra y viendo por el bien de los hombres. Los que siguen el camino del dolor con fidelidad pueden subir al cielo con seguridad".